jueves, 16 de febrero de 2012


 


PEDRO JUAN CAVALLERO
(PARAGUAY)

BIOGRAFÍA
(1786-1821)
 


Nació en Tobatí en 1786. Hizo sus estudios en el Real Colegio Seminario de San Carlos. A1 frente de los urbanos (31) de su pueblo natal marchó a la concentración de Barrero Grande y luego a Yaguarón. Actuó brillantemente can su padre el comandante Luis Cavallero y sus hermanos en las batallas de Paraguarí y Tacuarí. Sabemos que su padre murió a consecuencia de los trabajos y penalidades que pasó en la campaña.

Desmovilizado, retornó a la capital donde inició los trabajos subversivos. Era asiduo concurrente a las reuniones que se llevaban a cabo en lo de Recalde. A él le tocó decidir la realización, del golpe en la noche del 14 de mayo sin esperar la llegada de las tropas del Sur acaudilladas par Fulgencio Yegros y Cavañas. Encabezó y dirigió el golpe ocupando con sus compañeros los cuarteles en la noche del 14.

Pedro Juan firma todas las notas que los revolucionarios dirigen a Velasco desde el cuartel. Su jefatura en los acontecimientos que se desarrollan en la órbita asuncena es indiscutible. Pero no hay que olvidar que él toma las determinaciones en forma provisoria hasta que llegue a la capital el jefe de la revolución, Fulgencio Yegros.
Su ideología libertaria era firme y madurada. El informe del teniente José de Abreu contiene cierta curiosa referencia que trasunta el criterio del joven soldado y enjuicia su firme actitud de la hora. Refiere el comisionado portugués que, habiendo requerido a Cavallero los motivos que demoraban su partida de Asunción, éste le respondió que esperaba la llegada de Fulgencio Yegros y que, entre tanto, "pidiera toda cuanto necesitaba; pero que no era conveniente que saliera de la ciudad antes de la llegada de los nombrados oficiales de la plana mayor -Yegros y Cavañas-. En esa ocasión le dijo aquel capitán que, teniendo cuatro hermanos oficiales empleados en el real servicio y habiendo ido su madre viuda a pedir al gobernador Velasco uno de esos hijos para darle compañía, no se le concedió; y que al exponer el capitán, al mismo Velasco, que su padre Luis Cavallero que había hecho la gran picada y el puente del Tacuarí por los que atacaron y vencieron a los de Buenos Aires, murió repentinamente en aquel trabajo, quedando empeñado, para lo cual solicitaba se le permitiera embarcar una partida de tabaco y yerba mate para Montevideo, pagando los fletes correspondientes, no se le admitió esa pretensión, y sólo los europeos embarcaron sus efectos, quedando excluidos de este recurso los paraguayos, y que por estas y otras razones los de Buenos Aires procuraban su 'libertad".
En los meses finales de 1811 actuó siempre en un plano principal. En el congreso del 17 de junio fue elegido vocal de la Primera Junta; a1 mismo tiempo desempeñó el mando de la guarnición de la plaza.
Casó a fines de 1811 con doña Juana Mayor Viana.
Si es brillante y gloriosa la actitud de Pedro Juan Cavallero en la revolución de mayo, no lo es menos la acción del prócer en la Primera Junta de Gobierno, que integró después. El programa de ese organismo en su corta labor gubernativa honra al Paraguay y como reflexiona Domínguez si se hubiera prolongado lo hubiese colocado a la cabeza de las naciones más progresistas de la América emancipada. "Mientras formó parte del gobierno -dice Sánchez Quell- se proclamó la libre navegación, se protegió la primera empresa de navegación a vapor, se fomentó la enseñanza y cultura general del pueblo, se gestionó la independencia judicial, se organizó la expedición al Chaco para retomar Borbón de los portugueses. Y fue, por qué no decirlo, el único que tuvo un gesto de altivez cuando el dictador envió a la cárcel a los autores de nuestra liberación".
Cavallero presidió el congreso de octubre de 1813. Hubo en esa asamblea muchos partidarios: de que continuase en el gobierno pero al fin prevaleció la fórmula del consulado Yegros-Francia. Se opuso después al avance arrollador de la personalidad del futuro dictador y trató en toda forma de evitar el establecimiento del gobierno personal y autoritario Chaves escribe en El Supremo Dictador:
"No obstante, surgieron hombres dispuestos a cruzarse en el camino de las ambiciones del Dr. Francia. Veían clara la meta que buscaba el hábil político. Nació la idea de enfrentarlo de una vez, de abatirlo para siempre, cuando era posible hacerlo todavía. Son dos caudillos ilustres los que inician la resistencia, Juan Manuel Gamarra, héroe de Tacuarí y Pedro Juan Cavallero, adalid de la revolución del 14 de mayo. Se acercaron sin duda, a Yegros, para prevenirle del peligro e invitarle a una acción decisiva. Pero Fulgencio Yegros tenía un alma generosa y noble, carecía de toda ambición y estaba cansado de la función gubernativa; sólo quería dejarla de una vez para siempre y retornar a su estancia de Quiquió a vivir la vida pura de la campaña paraguaya, lejos de la miseria y de las maniobras de la política.
"Gamarra y Cavallero prosiguen sin duda sus trabajos subversivos. Francia se entera de sus intenciones y pide a su colega la adopción de medidas contra ellos. Yegros se resiste al principio; pero al fin cede por amor a la paz y a la tranquilidad de la República: "Consiguientemente a la acordada por este Supremo Gobierno en 7 de corriente: el Escribano de la Gobernación Gral. Don Jacinto Ruiz intimará a don Juan Gamarra, a Don José Teodoro Fernández, y a don Pedro Juan Cavallero, que dentro de tres, días perentorios se retiren y, salgan los dos primeros a sus residencias en Villa Concepción, y el tercero a su estancia en la Cordillera sin poder volver a esta ciudad no siendo con licencia expresa de este gobierno bajo apercibimiento de que en caso de cualquier contravención a esta superior determinación se tomaran las providencias correspondientes."
¿Qué tormenta se preparaba en el horizonte como para justificar esta medida excepcional? ¿Qué motivo tan fundamental habría movido a Yegros a suscribir esa orden dirigida contra su ex-colega, compañero de muchos años e íntimo amigo?
Cuando el antiguo escribano de gobierno don Jacinto Ruiz marcha a notificar la orden, ya Gamarra se ha ausentada a Villa de la Concepción y Cavallero a su estancia de la Cordillera Ynmediatamente pasé a la Chacra de Ybyray a efecto de hacer saber el expresado Superior Auto a Don Pedro Juan Cavallero, y se me dio noticias por su Madre Política Doña Susana Viana haberse ido en aquel mismo día a su Estancia de la Cordillera; lo que pongo por diligencia para que conste. Ruiz. Nota: Que no se ha hecho saber a Don Juan Manuel Gamarra el Superior auto de la vuelta par haberse ausentado a su vecindario o de Villa Real lo que también anotó para Que conste. Ruiz".
De 1814 a 1820 ''Pedro Juan vivió retirado en su establecimiento de campo de la Cordillera. En abril de 1820 fue complicado en la supuesta conspiración contra el Dictador; traído a la capital fue encarcelado y torturado. Según una versión de Wisner, producido el derrocamiento del Dictador, Cavallero debía asumir el comando de las tropas.
Condenado a 'la pena de muerte se suicidó el 13 de julio de 1821 dejando escritas estas líneas en 'la pared de su celda: "Yo bien sé que el suicidio es contrario a las leyes de Dios y de la patria, pero la sed de sangre del tirano de mi patria no se ha de aplacar con la mía".
Así terminó la vida rutilante de aquel gran patriota cuyo recuerdo será siempre un foco de inextinguible luz para las nuevas generaciones. Con justicia Ignacio A. Pane lo calificó como el héroe completo, diciendo que fue "el héroe de la patria independencia - el manir de las patrias libertades".


(31) Los urbanos eran una especie de reservistas movilizadas en caso de necesidad.

(Tomado de http://www.portalguarani.com/obras_autores_detalles.php?id_obras=13805)
 

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